¿Cómo se reconoce
una pasta de calidad?
La pasta es un alimento rico en elementos nutritivos importantes y es muy digerible. Sin embargo, para conservar estas características debe cocinarse de manera uniforme tanto por fuera como por dentro, sin dispersar sus propios nutrientes en el agua durante la cocción.
La pasta es de calidad cuando:
Tiene el espesor justo para que se cocine de manera uniforme y en el tiempo adecuado (no demasiado)
Tiene el espesor justo para que se cocine de manera uniforme y en el tiempo adecuado (no demasiado)
Queda compacta, tenaz y elástica, es decir “al dente” aún muchas horas después de la cocción
Se cocina de manera uniforme por fuera y por dentro, sin partes crudas (que a menudo se confunden con la característica de estar “al dente”) y después de la cocción no tiene pátina externa.
Su agua de cocción es lo más clara posible (cuando el tiempo de cocción es largo la pasta pierde en el agua el almidón, las vitaminas, las proteínas y se presenta “blanda” al masticarla);
Durante la masticación es elástica y consistente, características que hacen que la pasta esté “al dente”. La elasticidad se obtiene si el gluten es de alta calidad (y esto depende del uso de sémolas de alta calidad) y si el proceso de secado se realiza a las temperaturas adecuadas.
Es porosa. La porosidad permite que cada grano de pasta absorba el agua de manera uniforme desde el exterior al interior y, por tanto, se cocine perfectamente. Esta característica también depende del proceso de secado utilizado: si es moderado, es decir, si se realiza a la temperatura adecuada, la superficie de la pasta no se plastifica, sigue siendo porosa y es capaz de absorber agua.
El color es de un cálido amarillo brillante tanto antes como después de la cocción. Uno de los requisitos fundamentales para que una sémola sea considerada de calidad es el índice de amarillo que no debe ser inferior a 24. Si se seca a temperaturas muy elevadas (hoy en día es muy común en las fábricas de pasta italianas y extranjeras, porque así se reducen a la mitad los tiempos y los costes de producción), la pasta sufre un proceso de “plastificación” en el exterior, lo que provoca un tiempo de cocción largo y una cocción desigual; quedará cruda en el interior y será menos digerible. La pasta es apreciada por ser un alimento digerible y adecuado para muchas personas.
Las características de la pasta Granoro
El espesor adecuado
Cocción
uniforme
Producida
con sémolas
seleccionadas
Excelente tenacidad
Las características de la Pasta Granoro son su perfume, su espesor adecuado, su color amarillo intenso, su gusto delicado, su elasticidad y su consistencia después de la cocción (incluso después de muchas horas).
Son las características de la pasta de primera calidad, que se resumen en el concepto de “pasta al dente”.
La pasta Granoro es una pasta de calidad gracias a la cuidadosa selección de las sémolas de trigo duro (rigurosamente obtenidas del corazón del grano de trigo), a los minuciosos controles realizados durante todas las fases de producción y a los métodos de elaboración de la pasta que la Familia Mastromauro conoce profundamente. Además, se cocina de manera uniforme y después de la cocción se presenta “al dente”, quedando consistente y con cuerpo incluso tras haber quedado por muchas horas en el plato.
El largo tiempo de cocción no es un indicio de calidad, sino que viene determinado por el espesor de la pasta.
Las pastas muy “espesas” están crudas por fuera y parcialmente crudas por dentro, dando la falsa impresión de estar “al dente”.